Capítulo VIII, Simplemente Amor

La habitación era oscura, solo estaba iluminada por dos antorchas, en el fondo se erguía un gran trono de oro puro con gemas incrustadas que lo adornaban, una gran alfombra roja iba desde la entrada hasta el trono que tenia dos más pequeños a ambos lados de el; un hombre ocupaba el tono más grande, sentado cómodamente con la cabeza recostada en una de sus manos y el codo de la misma apoyado en el antebrazo del trono.

Él era de cabello negro y ojos del mismo color, llenos de maldad, con una chispa roja fulgurando en ellos, cualquiera diría que tenia unos ojos que ni el mismo diablo tendría, ojos que podrían matarte con una sola mirada, su piel era blanca, pálida como si llevase mucho tiempo sin ver el sol. De buena musculatura, vestía un traje de aquel material similar al cuero de color café oscuro, casi llegando al negro, calzaba unas botas negras del mismo material del traje y una capa roja terminaba su atuendo; Sobre sus cabellos finamente ordenados descansaba una tiara hecha de hilos de oro delicadamente trenzados, de orejas puntiagudas.

El hombre escuchaba atentamente las palabras de otros dos que estaban arrodillados delante de él, era un hombre y una mujer, era aquel elfo rubio, Ian, que había perseguido a Isis y a Zane.

-…Pero entonces cuando revisaba mis flechas, la encontré, mi lord –continuo Ian mostrándole una flecha de madera tallada con la punta de plata manchada de sangre- herí a la mujer que iba con Zane, creo que es la salvadora de la profecía, pero compruébelo usted, mi Rey –Y tímidamente le extendió la flecha al Rey, él la tomo y bruscamente se puso de pie, Ian volvió rápidamente a su lugar.

-Creí que había sido claro en mis indicaciones con ustedes –dijo el Rey con voz imponente que hizo retumbar la habitación –Quiero ha Zane vivo ¿Qué pasaría si una flecha lo matase? –Dijo pausadamente –no dudéis que los torturaría por la eternidad, si, la muerte no seria un castigo para ustedes,

-Pe…Pero…mi lord –hablo temerosa la mujer –Zane es muy hábil y seguro que esquivaría cualquier flecha que le lanzásemos y los otros…

-No me importan los otros –la interrumpió el Rey y luego pausadamente continuo –Ian, si esta es la sangre de la salvadora significara que arruinaste nuestra oportunidad de tenerla de nuestro lado, pero comprobémoslo -El Rey levanto la flecha y susurro – cesjro rogope yi seyirepohe.

La sangre de Isis como la vez en la que Zane había comprobado si era la salvadora emitió un brillo verde y luego de unos segundos la bien tallada flecha se hizo añicos en la mano del Rey lo que la hizo sangrar.

-Vaya –dijo el con una malévola sonrisa en el rostro apretando su mano que sangraba –es más de lo que me esperaba de la sangre de la salvadora, creo que le tendré que hacer una visita -Un resplandor llego desde el otro lado de la habitación, un brillo plateado salía de una urna repleta de agua, el Rey a paso elegante se aproximo hasta ella, una mueca de asco se formo en su rostro –Esos dos están en el bosque maldito, el poder de esa mujer es más grande de lo esperaba, ha roto la maldición del bosque -La imagen del bosque maldito flotaba en aquella urna, brillante, mas que cualquier otro objeto en el mundo de la Luz.

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-Zane –dijo feliz Isis mientras caminaba atrás del joven viendo hacia todos lados –aun no puedo creer que fuese mi poder el que hizo esto.

-Pues créelo –le contestó él girando para darle la cara –has liberado a todas las almas atrapadas de este lugar, destruiste las maldiciones cuando demostrarte amor por los habitantes de estos mundos.

-Si –Isis vio a su alrededor desde el momento en que había descubierto, mas bien había explotado su magia y el bosque había dejado pasar los rayos del sol todas aquellas rocas con formas habían desaparecido y por donde fuesen se encontraban espíritus que se despedían y se elevaban al cielo perdiéndose y otros, desaparecían en las entrañas mismas de la tierra

-En vista de las circunstancias y como ya dije demoraremos más en llegar y puesto que has descubierto tu magia la clase empezará ahora –dijo Zane esperando que Isis lo alcanzara para caminar a su lado.

-Bien ¿Qué tengo que hacer? –Preguntó ella entusiasmada.

-Por el momento escuchar – le respondió Zane viéndola a los ojos, primero ¿Qué es magia?

-Algo que supera las leyes naturales –dijo Isis después de pensar un poco.

-Casi, pero magia, es el poder que habita en cada persona, en cada objeto, en cada animal, hasta las rocas tienen su propia magia, solo es cuestión de que cada persona descubra ese poder. No siempre la magia es aquello increíble, es la cualidad que nos hace únicos, hace tiempo conocí a una mujer, su magia era creer, ella creía en los demás más que ellos mismos, creía tanto en ellos que hacia que las propias personas se superaran y fueran únicas. Todos los mundos están llenos de magia, pero son muy pocos los que la pueden ver y apreciar.

-Si la magia es algo tan sencillo como lo el poder que habita en cada uno, ¿Qué hay con la magia que te vi hacer? –preguntó Isis pensativa.

-A eso iba –dijo él cuando recogía una hoja de árbol –desde los inicios a razas especificas se les fueron concebidas con un, podríamos llamarle exceso de magia, algo que se les desbordaba de la vida, magia pura e insólita. Los elfos fuimos la primera raza mágica, luego vinieron las hadas pero no se les fue concebida la misma cantidad de magia y luego vienen las demás claro con forme fueron creadas se fue disminuyendo la cantidad de magia. Ahora el primer ejerció mágico que harás es este –Ambos se detuvieron, Zane hacia levitar la hoja que había recogido en su mano –lo harás en todo el camino mientras yo te voy explicando lo demás, no debe ser difícil para la salvadora –terminó mientras le pasaba la hoja levitando y empezaban a caminar.

-Eso intentaré –Isis vio la pequeña hoja sobre la palma de la mano mientras caminaba, -espera que ¿no tengo que decir alguna palabra mágica o algo así?

-Para este ejercicio no, ahora para comprender la magia y como tendrás que lidiar con todas las razas, te explicaré sus inicios –mencionó él al momento que Isis fruncía el ceño tratando de levantar la hoja, hubiera ayudado más si él le hubiese dicho como hacerlo.

>>Al inicio de los tiempos el único mundo, conocido como Flatao, era habitado solo por los dioses, pero paso el tiempo y la diosa Leina quien era reconocida entre los dioses como la más hermosa y la más poderosa entre las diosas, pensó que Flatao era demasiado solo para los dioses así que decidió crear a unas criaturas que habitaran y embellecieran a Flatao, estuvo tres días pensando lo que iba a crear cerca de una laguna y al final del tercer día se le ocurrió que crearía un ser semejante a ella, así que se puso de pie y caminó hacia la laguna donde vio una flor de loto, brillante ante la luna, así que tomo dos de las muchas que flotaban en la laguna y las colocó en la tierra seca, arrancó unos de sus platinos cabellos y canto un conjuro que ha sido imposible de descifrar, cuando ella terminó de cantar, las flores y sus cabellos ya no estaban, en ves de ellos los primeros elfos, un varón y una mujer, se hallaban delante de ella orgullosa por sus creaciones llevó a aquellos elfos y se los mostró a los demás dioses, entonces ellos envidiosos de que solo la diosa Leina tuviera una creación uno por uno se fueron levantando de sus tronos para hacer la creación que deseaban habitaría Flatao, el segundo dios es ponerse de pie fue Asué conocida por todos como una mujer amable y sumamente atenta con todos, amaba protegerlos, ella dijo que también crearía a un ser que viviera en Flatao pero como tanto la amaba crearía un ser que siempre cuidaría de el, así que abrió la boca y de ella salió la primera hada pequeña y brillante como ya has visto a Emica.

>>Luego se paró el dios Trou quien era experto en armas, sacó su magnifica espada de su vaina y la clavó en la tierra al frente de él, dio un gran rugido y luego levantó su espada, del lugar donde había estado el arma salió el primer enano y seguido de el una enana, ambos del tamaño de un niño pequeño, el dios Trou dijo que aquellas criaturas tendrían su fascinación por la fabricación de armas y como a el no le agradaba mucho el sol sus criaturas vivirían bajo la tierra cuidando de las riquezas escondidas de Flatao .

>>Él siguiente en levantarse fue el la diosa Siré quien adoraba el agua y era conocida por sus demás compañeros como una coqueta, dijo que crearía algo que viviera del agua así que camino hasta la laguna en donde la diosa Leina había tomado las flores y se inclino tocando la punta del agua con su mano y de ella se deslizo la primera sirena y el primer tritón, pero también dijo que para que sus queridos habitantes del agua no estuvieran solos, introdujo su otra mano al agua y la laguna se unió con el mar dando vida a toda clase de animales marinos.

>>Los siguientes reyes aunque crearon grandes razas no mereces más que su mención ya que apenas dijeron una palabra y surgieron sus creaciones. Luego de Siré, siguió el dios Yan quien creo a los gigantes, después la diosa Nara madre de las driadas y Náyades. Luego de eso solo quedaban dos dioses pendientes la diosa Anne y Dios, Anne se paro y dijo que ella no tenia creaciones igualmente hermosas a las que los otros habían creado pero haría su mejor esfuerzo en crear compañeros para sus creaciones, extendió los brazos y de ellos cientos de seres salieron, los primeros animales.

>>Y el ultimo en ponerse de pie fue Dios el mas poderoso y humilde de todos los dioses, dijo que el no podría crear un ser tan perfecto como el que había creado Leina ni tan creativo y dulces como las de Asué o tan nobles como los de Anne, el crearía a un ser que amara, que amara a todos, que se amara a si mismo y que por sobre todo amara sin esperar nada a cambio, que compartiera sin esperar que compartieran con él, y así lo hizo mando a llamar a uno de sus discípulos a quienes se les conoce con el nombre de Ángeles y le hizo crear una imagen a su semejanza de tierra en pequeño, cuando el Ángel hubo terminado, se acerco y soplo a la nariz del montículo para que tuviera vida, y le llamo Adán. –Zane hizo una pausa al momento que volteaba y veía a Isis exhausta así que decidieron tomar un descanso.

-Lo ultimo que has contado creo saberlo –dijo Isis –es la historia que cuentan la Iglesia sobre la creación del hombre, y de el surgió Eva, la primera mujer.

-Bueno es parecido –dijo Zane –veras los humanos tienden a cambiar las cosas un poco pues no son muy buenos recordando. Pero la verdadera historia pasó poco después de lo que te he contando, los seres que habían creado los dioses vivían en armonía, las criaturas habían descubierto su magia y eran capaces de sobrevivir por ellos mismos así que los dioses decidieron dejarles a Flatao para ellos solos. Solo había un ser que no había descubierto su magia: Adán. Dios que miraba a Adán todos los días noto que este estaba muy triste así que decidió que haría algo para alegrar a lo que había creado, Anne que se había fijado que Dios estaba muy pensativo se acercó a él y le pregunto que era lo que tenia y el le contesto que estaba preocupado por Adán, Anne le dijo que el problema que tenia Adán era muy fácil de arreglar, lo que pasaba era que cada criatura que se había creado tenia una pareja similar a ellas con quien compartir y Adán no tenia. Dios estuvo de acuerdo con Anne y le agradecía la solución pero lamentablemente no le quedaba suficiente fuerza para crear a otra creatura pues aun no se reponía de toda la magia que había gastado al crear a Adán, Anne le dijo que ella también estaba exhausta como para ayudarlo pero entonces Leina quien había estado escuchando la conversación de los dos dioses se acerco y dijo que ella ya había recuperado un poco de magia y si Dios quería juntos podían crear a la compañera de Adán.

>>Y así lo hicieron, esperaron a que Adán estuviese dormido y fue la diosa Leina la que tomo una de las costillas de Adán y junto con Dios crearon a la Primera mujer que llevo el nombre de Eva. Quien poseía una belleza parecida a la Leina, pero sin llegar a ser tanta como la de sus elfos, y la bondad y el amor que Dios había deseado para su creación. Dios contempló por un tiempo a Eva y dijo que ella seria la que daría vida a todos los demás humanos que poblarían Flatao.

>>El tiempo paso y Adán y Eva les enseñaron a todas las demás criaturas de la creación lo que era el amor y la entrega el uno por el otro, las razas estuvieron tan agradecidas con los humanos que les dieron dones, los elfos les regalamos la capacidad de hacer magia y una inteligencia aguda, las hadas el poder de la creatividad, las driadas la fertilidad, las náyades la agilidad, los enanos se unieron para regalarles la fortaleza física de la que eran característicos y los gigantes les dieron el tamaño, pues veras al inicio los humanos eran un poco mas grandes que los enanos. Luego de esto empieza otra historia, la historia de la guerra pero esa te la contare en otra oportunidad pues por el momento ya te he contado suficiente.

Ambos volvieron a retomar el camino, Isis seguía tratando de hacer levitar su hoja pero apenas podía hacer que se moviera en su mano, el silencio la volvía a oprimir hacia ya mas de media hora desde que Zane había dejado de hablar, así que decidió buscar algo de que hablar con él y lo primero que vino a su mente fue aquello que mas deseaba saber.

– ¿Falta mucho para llegar con los demás? –pregunto ella viendo como el atardecer caía sobre ellos.

-No mucho –contesto él –mañana por la mañana estaremos en las afueras del bosque maldito, bueno ahora habrá que buscarle otro nombre pues gracias a ti ya no es maldito.

-Es cierto –dijo ella divertida y apresuro el paso, moría por hablar con Kevin de todo lo que había pasado en el bosque.

-Pasaremos la noche aquí –anuncio Zane cuando llegaron a un lugar donde los arboles no estaban tan juntos –déjame ver como esta tu herida –agrego el cuando Isis se hubo sentado.

-Claro –dijo ella y levanto un poco su pantalón para dejar a la vista las vendas que Zane le había colocado en la mañana, para su alivio no había ni rastro de sangre.

Zane se inclino y empezó a quitar las vendas de la pierna de Isis, cuando se deshizo de ellas quedo a la vista la herida, la piel que antes estaba negra alrededor de la herida ahora tenia un color morado y una costra cubría lo que seria el agujero dejado por la flecha, La pierna le dolía pero desde la mañana el dolor había disminuido pero ahora que la presión de las vendas había desaparecido, un nuevo y mas intenso dolor le llego.

-Ya no colocare más vendas –le informo Zane –será mejor que la herida se seque al aire libre.

-Pero duele menos vendada –se quejo ella.

-Lo se pero solo así sanara más rápido.

-Zane –llamo ella cuando él revisaba la herida – ¿crees que mi amor por este mundo despertó mi verdadero poder?

Él levanto la vista hacia los ojos de Isis –si no es eso ¿Quién tiene tu amor? –pregunto y rápidamente desvió la mirada hacia el costado de la castaña donde descansaba su diario y estiro su mano para sujetarlo, Isis se dio cuenta de ello y coloco una de sus manos sobre una de las esquinas del diario para que él no lo levantara, Zane volvió la vista hacia los ojos verdes de ella, sus rostros estaban a centímetros –te he visto escribir en el ¿verdad?

-Zane, no pensé que fueras evasivo –dijo ella sonriendo.

-¿Evasivo? –Respondió él –yo no soy evasivo –Bajo la vista hacia los rosados labios de Isis, ¿Por qué esa humana le era tan irresistible?, desde que la había visto en la casa de los espejos aquella chica le había llamado la atención, esos labios, pensó acercándose un poco más a ella, milésimas los separaban, Isis no podía moverse sentía como su corazón empezaba a latirle con violencia, el se acercaba cada vez mas a sus labios, debía alejarse, “Isis” dijo una vocecita en su cabeza “¿Qué tu no deseas esto también?”. Ahora fue ella la que se acerco más a él.

-¡Isis, Zane! –grito una melodiosa voz detrás de los arboles de la izquierda.

Zane se separo por completo de Isis y volteo, Emica estaba caminaba hacia ellos y detrás del hada venían Wolfma y Kevin.